“No al chavismo”, claman miles de hondureños

Los hondureños dijeron sí a la paz, a la democracia, a la Constitución y al nuevo Gobierno. Vestidos de blanco, portando pancartas con frases como “Paz y democracia, fuera Mel y Chávez”, los catrachos dieron su respaldo al presidente de la República, Roberto Micheletti Baín, a su gabinete y al jefe del Estado Mayor Conjunto de las FF AA Romeo Vásquez Velásquez.
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En la multitudinaria marcha que se realizó ayer en el Parque Central de Tegucigalpa los hondureños pedían que se arrestara a Manuel Zelaya Rosales si se atrevía a regresar al país al mismo tiempo que exigían el respeto a la soberanía rechazando la intromisión de gobiernos extranjeros. “Que no vuelva, que no vuelva”, gritaban los manifestantes refiriéndose a Zelaya.
“Democracia sí, comunismo no; que lo arresten que lo arresten. No fue golpe, Micheletti legítimo sucesor constitucional”, gritaba la multitud mostrando un total repudio a quien fue su presidente y que fue separado de su cargo por no respetar la Constitución y las leyes. A medida que transcurría la mañana la multitud iba creciendo, mientras diferentes líderes del país, incluyendo religiosos le pedían a la gente que protestara bajo el respeto de las leyes.
Los líderes que disertaron manifestaron que Honduras “es un pueblo pobre, pero con dignidad” y pidieron al mundo que antes de emitir una condena vengan al país y verifiquen que aquí no se ha cometido ningún golpe de Estado.
Respaldo totalA la manifestación se hizo presente el presidente de la República, Roberto Micheletti, y el jefe del Estado Mayor Conjunto de las FF AA, Romeo Vásquez Velásquez.Ambos fueron aplaudidos y apoyados por los hondureños como defensores de la Constitución.“¡Romeo, Romeo!”, coreaban los asistentes.
“Felicitamos a los héroes de esta jornada: nuestro ejército hondureño”, dijo Micheletti a la multitud. “Agradezco a todas las organizaciones de la sociedad civil y a los hondureños concentrados aquí para defender la democracia, la paz y la tranquilidad en nuestro país”, añadió.
El Presidente se comprometió ante la multitud de hondureños a celebrar las elecciones el 29 de noviembre. “Asumo el reto de estos seis meses y prometo que el 29 de noviembre habrá elecciones para que los hondureños elijan a su nuevo presidente”, reiteró Micheletti Baín, quien sostuvo que a los hondureños “no logró asustarnos la tendencia izquierdista”.
“En la mañana escuché a un señor de Venezuela que iba a venir a atacar a Honduras y mi respuesta fue señor en este país somos siete millones y medio de habitantes que defenderemos la democracia’”.

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Las voces de apoyoEl empresario Emilio Larach manifestó que la separación de Zelaya ocurrió por la terquedad del ex presidente en no escuchar la voluntad del pueblo y preferir oír la voz de los presidentes de la Alternativa Bolivariana, Alba.“Solamente tenemos una patria, solamente tenemos una casa común que se llama Honduras y vamos a unir voluntades para defender lo que es nuestro”, decía el pastor Evelio Reyes. “¡Viva Honduras, viva Honduras!”, gritaban los asistentes.
Asimismo, hicieron un llamado al nuevo gobierno para que no siga cometiendo los mismos vicios de antaño. “Tenemos que salir adelante de esta crisis, los invito a manifestarse de manera no violenta, pacífica y a través de los canales correspondientes”, dijo Reyes.
“No al chavismo, no a la intervención de Cuba ni de Nicaragua”, dijo una de las asistentes al evento, a favor de la soberanía hondureña.“Los hondureños hemos salvado nuestra patria. La justicia está de nuestro lado y lo estamos demostrando al mundo”, manifestó el analista Jorge Yllescas Oliva, al momento de hacer uso de la palabra.
Yllescas Oliva fue el encargado de dar a conocer entre la multitud, que a Zelaya Rosales se le acusa de haber cometido al menos 18 delitos, por los cuales si regresa al país inmediatamente debe ser capturado por las autoridades policiales y enviarlo a la cárcel para que pague la pena.
Matías Fúnez, líder de la izquierda hondureña, también se unió al movimiento por la defensa de la democracia.El ex jefe de las Fuerzas Armadas, Daniel López, se unió a la marcha y envió al resto del mundo el mensaje de que “en Honduras no hubo golpe de Estado. Las Fuerzas Armadas cumplieron con la Constitución”, afirmó. Enrique Ortez Colindres, canciller de Honduras, señaló que Zelaya ingresará al país como cualquier ciudadano, mientras que el presidente Roberto Micheletti dijo que si regresa a Honduras será capturado. Zelaya no habló de corrupciónEl expresidente de Honduras, Manuel Zelaya Rosales, habló ayer ante la Organización de las Naciones Unidas, ONU, de una huelga general en Honduras, la cual no se ve por ningún lado.
Convirtiéndose en mártir, Zelaya Rosales, explicaba en el organismo internacional que su separación ilegal del cargo fue “un crimen”, sin embargo, no habló sobre la escandalosa corrupción en su gobierno, sobre el incremento de las narco-avionetas provenientes de Venezuela, y sobre violencia y criminalidad que reinó durante su administración, sin que hiciera nada por contrarrestarla.
Mientras Zelaya contaba novelescamente su detención y expulsión del país, los embajadores aplaudían cada capítulo y condenaban a Honduras.
Lo que sucedía en las Naciones Unidas contrastaba con los hechos en la plaza central de Tegucigalpa donde miles y miles de hondureños gritaban “que no vuelva, que no vuelva”, refiriéndose a Zelaya.La multitud minimizó de una sola vez a los pequeños grupos leales a Zelaya, que aún buscan llamar la atención de la comunidad internacional.